Czapek & Cie. vuelve a la vida con elegancia y respeto
Los coleccionistas y amantes de la alta relojería están de celebración. El 10 de noviembre de este año (es decir, hace tres días), François Czapek, una de figura representativa de la relojería del siglo XIX, resurgió de la historia para instalarse en el siglo XXI con la colección Quai des Bergues.
Pero todo empezó hace mucho, mucho tiempo. Cuando el relojero polaco François Czapek, nacido en Bohemia (República Checa hoy) era socio de Antoine Norbert de Patek. Los dos hombres vivían en Suiza. Pero el nombre de Czapek, aunque todavía no muy conocido, empezó a sonar en los círculos más prestigiosos de su época. Sus relojes excepcionales eran difíciles de conseguir y fueron muy codiciados por la nobleza de esa época. Napoleón III, emperador de Francia, incluso le concedió el título Relojero de la Corte Imperial. A día de hoy, los relojes Czapek son muy codiciados por los coleccionistas.
El renacimiento comenzó cuando un grupo de entusisastas de los relojes contaron la historia de Czapec a tres empresarios en Suiza en 2013. Estaban convencidos de que lo que tenían delante era un gran legado histórico y decidieron organizar el retorno de Czapek. Contrataron a un conocido historiador, plenamente consciente del hecho de que el trabajo de investigación fijaría la pauta para futuros desarrollos. También rastrearon cronometradores Czapek que habían sido vendidos en subastas. El primer paso fue constituir Czapek & Cie, una sociedad anónima que tomó el nombre de la empresa creada por François Czapek el 01 de mayo 1845.
Así fue como la marca Czapek Genève ha vuelto a nacer otra vez al 10 de noviembre de este año. Ese día, nació la primera colección en el Flower Clock, el monumento más visitado de Ginebra. Quai des Bergues es ahora oficialmente la primera familia de seis modelos que perpetuará el estilo Czapek y se integra al selecto segmento de la alta relojería.
Indagar en el pasado, les permitió saber a ciencia cierta que Czapek no solo dominaba la ciencia de la cronometría, sino que además sabía cómo proporcionar a sus guardatiempos un estilo estético especial y muy personal. Cuando los tres socios vieron el reloj de bolsillo Ref. 3430, fabricado por François Czapek en Ginebra en 1850, Harry Guhl, Xavier de Roquemaurel y un relojero que prefiere permanecer en el anonimato, estaban fascinados por la elegancia del reloj y el ADN de sus formas: la elongación con clase de los números romanos, la delgadez de las manecillas forjadas, y, sobre todo, el posicionamiento inusual de los dos sub-esferas, una a las 4:30 y la otra a las 7:30.
La primera colección se llama Quai des Bergues, en memoria del lugar donde François Czapek tenía su taller. Para financiar el proyecto, los tres líderes de la compañía encontraron inversores privados. También vendieron el Czapek Design Study Chronograph a un pequeño círculo de amigos cercanos. Este cronógrafo lleva un calibre histórico, el C73, que data de 1971. Esto les permitió financiar la investigación en el diseño, el desarrollo de un calibre de propiedad de alta calidad, así como la primera pre-serie. Luego eligieron el método crowdfunding, una forma participativa de financiación, que permite a las personas ser inversores.
El siguiente paso se dio en Chronode, la compañía con sede en Le Locle de Jean-François Mojon, que desarrolló el Czapek SXH1, un calibre mecánico de alta relojería con 29 rubíes. El reloj está finamente decorado y es estéticamente fiel al original de 1850. Este movimiento manual tiene dos barriletes que funcionan a 21,600 alt/h. Tiene una reserva de marcha de 168 horas, o lo que es lo mismo, siete días.
La caja ha sido manufacturada por LAB en La Chaux-de-Fonds, y hay cuatro versiones: oro rosa, oro blanco, titanio o acero “XO”, un material que es ultra-resistente a corrosión y que nunca se ha utilizado en relojería antes. Para los modelos clásicos (oro rosa u oro blanco), agujas de acero azulado o forjadas y esmalte grand feu para la carátula. Los típicos subdiales de Czapek marcan a las 7:30 los segundos y a las 4:30 la reserva de marcha y los días naturales, al mismo tiempo.
La primera fase del proyecto, que incluyó la investigación, el desarrollo del primer calibre, los estudios para diseñar la caja y la producción de la primera serie fue financiado por una suma de unos 500,000 francos suizos recaudados entre los amigos y los inversores privados. Ahora, el objetivo es recaudar 1 millón de francos suizos a través de una campaña crowfunding de capital dirigida a los amantes del reloj. A partir de ahora, cualquiera puede convertirse en un inversionista en Czapek & Cie y contribuir a su desarrollo. Los fundadores de la compañía eligieron Raizers, la primera plataforma crowdinvesting europea. Favorece a las empresas que cumplen criterios muy estrictos de elegibilidad, empresas innovadoras o las que están creciendo vigorosamente y son dirigidos por equipos profesionales. Una segunda plataforma en el Reino Unido se confirmará pronto. Czapek & Cie tiene su sede en Ginebra.